viernes, 25 de abril de 2008

Como DEJE DE FUMAR!!!….por una VIDA SANA

Reconozco que no siempre fui la persona que soy ahora, la que vela por su salud en forma prioritaria y pienso que a muchos les ha pasado lo mismo, lo importante es darnos cuenta a tiempo y librarnos de todo de lo que nos pueda perjudicar. Si efectivamente me he intoxicado con cigarrillos en una etapa creo que corta de mi vida, aunque viéndolo bien, no tan corta, habrán sido unos 7 años!!
Empecé a los 22 , como todos, por curiosidad y creo que también por dármela de mayorcito o dizque “fino”, como que en esa época se veía bien tener un pucho en la mano. Yo no elegía los cigarrillos por su “sabor” más bien los elegía por su cajetilla, tenía que ser llamativa y bonita y obviamente que los cigarrillos importados eran los mas vistosos –y los más caros- yo compraba la marca Saratoga, el color del papel era café, eran más largos y también más delgados que los “comunes nacionales”. En realidad solo los fumaba cuando estaba acompañado, de seguro que pensaba que era un acto distinguido, me gustaba también brindarlos, así todos veían la “clase y calidad” de mis puchos.
Por esa época me cambié de trabajo, me contrataron en el Grand hotel Guayaquil para un puesto de recepción nocturna, desde las 12 AM hasta las 7AM es decir toda la madrugada. Al cigarrillo se lo asocia con la noche y fue ahí, donde aprendí realmente a fumar, a esas horas no había gerente ni superior que te vigilara, así es que podías hacer algunas cosas con más libertad. Y digo aprendí porque empecé a “golpear” (llegar mediante una especie de suspiro el humo a los pulmones) eso bastó para que poco a poco incrementara la cantidad de cigarrillos –que a partir de ese entonces, si los fumaba de verdad-
Me cambié de marca de cigarrillos, el Saratoga era muy suave, preferí el Marlboro Light nacional, eran “ricos” y a mitad de precio –una ganga- Ya podía fumar estando solo!!! Ya sea escuchando música, leyendo, viendo TV., después del desayuno, del almuerzo y de la cena Y por su puesto también lo seguía fumando acompañado, pero eso si, si podía no invitaba, que cada uno se costee su vicio –pensaba-
Para ir al baño por las mañanas era todo un ritual, tenía que estar sentadito con periódico del día y mi pucho porque sino…no podía. Tal era el vicio que apenas me levantaba me fumaba mi primer cigarrito, y de uno en uno llegaba a la CAJETILLA diaria
A los 29 años en un examen de rutina me detectaron una ligera hipertensión más taquicardia, el doctor me dijo que era debido al cigarrillo y que debería pensar en dejarlo poco a poco. Mi hijo en ese entonces contaba con apenas 2 añitos y pensé que no era justo el no cuidarme teniendo una gran responsabilidad como padre. Así es que fumé un marlboro, lo absorbí bien, supe que ése era el último y tomé la seria decisión de DEJAR DE FUMAR.

En verdad, no me sentí tan desesperado por el tabaco, como dicen otros fumadores, cierto es que si alguien estaba fumando cerca de mí, yo inhalaba el aire del ambiente percibiendo el “delicioso aroma” y sentía algo de debilidad pero también me decía: Hey, acaso no puedes cumplir con tu palabra!!! Acaso TU HIJO no merece lo mejor de ti!!! Y eso me daba una gran fuerza interior.
Llevo ya muchos años sin fumar, sé que no lo voy a hacer NUNCA más. Es más el olor a humo de cigarrillo me da nauseas, sencillamente no soporto ambientes de fumadores, es más no resisto al fumador aunque no esté fumando, ellos ya no perciben el olor que despiden de sus poros, ni de sus ropas, ni del ambiente.
Si deseas dejar de fumar, ten en cuenta que la decisión es SOLO TUYA, puede que a algunos se les haga un poco más difícil que a otros, pero di un : Hasta aquí!!! Y aunque llueva, truene o relampagueé, no vuelvas a fumar, piensa que tu familia te necesita y te quiere…..hazlo por ti y por una… VIDA SANA
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